Rehabilitación y ampliación para una vivienda unifamiliar en San Giovanni in Persiceto, Bolonia
Casita de Ladrillo es un proyecto de rehabilitación con ampliación para una vivienda unifamiliar en San Giovanni in Persiceto, en la provincia de Bologna (IT). Se trata de una tipología de vivienda rural típica de la campaña bolognese de la mitad del siglo XX que ha sido incorporada con los años a la periferia consolidada de la ciudad. Los clientes son Ellen, Michele, Tommaso y Nicola, una joven familia que ha decidido mudarse del centro histórico y construir una casa a su medida en una zona más tranquila.
Este es un tipo de encargo al que un arquitecto en su vida se enfrenta varias veces, aparentemente sencillo; sin embargo, en realidad es un proceso proyectual de gran responsabilidad y cada vez conlleva una profunda reflexión con respecto a temas intrínsecos a la profesión.
Valorización del patrimonio tipológico local – la casa que aprende del tiempo y del contexto
Si una arquitectura no se usa cae en ruinas. Por esta razón, el primer reto en una rehabilitación es su adaptación a la contemporaneidad sin alterar su esencia. La casa fue construida en 1954 con estructura en ladrillo, cubierta en madera, escalera central, tres plantas y dos habitaciones por planta; una tipología sencilla, austera y muy común en la zona. La primera intervención necesaria ha sido la consolidación estructural del edificio modificando apenas la distribución de los espacios.
Las necesidades de una familia hoy en día son distintas de las de una familia de hace casi 70 años. La manera de vivir la casa ha cambiado radicalmente. Decidimos entonces que la casa necesitaba una ampliación en la planta baja, un elemento de nueva construcción, con características completamente distintas que permitieran implementar todas las funciones que se echaban de menos en la construcción original. Los clientes necesitaban un espacio amplio en la planta baja, de manera que la cocina y el salón ya no eran dos espacios, sino uno solo donde se desarrolla la vida diurna. Así podían tener continuidad visual con el jardín y dejar libres a los niños jugar y explorar sin perderlos completamente de vista.
Adaptación de los espacios al habitar contemporáneo – la casa que aprende de sus habitantes
Ellen es sueca y Michele italiano. Ambos tienen una cultura distinta del habitar y su nueva casa tenía que reflejar ambas. Si Michele se sentía representado en la casa tradicional local, teníamos la oportunidad de trasladar a la ampliación de nueva construcción elementos típicos de la cultura arquitectónica sueca, como grandes ventanas con carpinterías en pino natural donde es costumbre poner en el poyete una lámpara de mesa durante las horas nocturnas, o el uso del ladrillo visto como acabado exterior. Este juego de dualidad facilitó además el reconocimiento de lo nuevo y de lo preexistente.
Adecuación energética y tecnológica – la casa que aprende de la emergencia climática
A la hora de enfrentarnos con un proyecto de rehabilitación o edificación es inevitable renovar el compromiso que tenemos con el medioambiente; cada decisión tiene una repercusión positiva o negativa. Un edificio de 70 años necesita inevitablemente una adecuación, así que decidimos ser radicales en esto. La casa tenía que tender en la medida de lo posible a los estándares de la casa pasiva, potenciando la inercia térmica del contendor, buscando la máxima eficiencia de las instalaciones y usando donde fuese posible materiales naturales y construidos por productores locales.