Casa Delle Arti di Comacchio

Autoría Zuloark,

Tipi Studio, FAHRE architetti

Ubicación Comacchio (Ferrara), Italia

Fotografía

Lourdes Cabrera

Categorías
Diseño Patrimonio Cultural

Reconversión del antiguo Museo de Barco Romano en un espacio de actividades culturales

¿Cómo se mide la calidad de una arquitectura? ¿Qué parámetros establecen si un edificio es un un buen ejemplo de práctica arquitectónica?

La “Casa delle arti di Comacchio” ha sido un caso de estudio perfecto para el análisis de estas valoraciones. El proyecto es obra pública muy relevante a nivel social, con un presupuesto reducido y la necesidad de satisfacer elevados estándares técnicos-acústicos, que a su vez  está ubicada en un contexto de gran valor histórico-monumental. Una arriesgada apuesta para una arquitectura local de bajo perfil y de gran impacto para la comunidad.

Comacchio es una antigua ciudad en la provincia de Ferrara, en el norte de Italia, una pequeña Venecia en el Delta del río Po rodeada por lagunas y canales, destino desde hace años para un turismo de nicho.

En el 2019 la ciudad ha visto nacer en el interior de la antigua cárcel de Palazzo Bellini, una nueva “Casa delle Arti”, un espacio dedicado enteramente a actividades culturales y didácticas para la música  y las artes escénicas. 

El proyecto además de cumplir con los requisitos técnicos funcionales para las actividades que se desarrollan en su interior, trata de respetar siempre 3 principios que consideramos indispensables llevar a la práctica para este tipo de proyecto:

La reconocibilidad. Cuanto más reconocible es la intervención, más fácil y directa es su lectura así como la de lo preexistente, explicitando la historia de la manufactura y sus transformaciones en el tiempo. Todos los elementos arquitectónicos son de madera y vidrio, materiales en armonía con el contexto aunque  claramente percibidos como elementos de la nueva intervención.

La reversibilidad. Gracias a la utilización de tecnologías en seco, el proyecto es completamente reversible, de esta manera, tampoco desde un punto de vista conceptual, compite en ningún momento con la edificación histórica que lo alberga. La ligereza y el carácter efímero del proyecto contemporáneo se contrapone a la naturaleza sólida y austera del edificio histórico, construido  en el ladrillo macizo típico de las cárceles medievales.

La sostenibilidad ambiental. La elección de utilizar materiales naturales, en particular la madera, se debe sobre todo a la voluntad de cambio en las formas de construir y de hacer arquitectura. Por un lado cumpliendo con la economía y la funcionalidad de la obra, pero sobre todo enfocando la práctica al respeto del medioambiente. La madera, entre los materiales de construcción tradicionales, es de los menos energívoros en su proceso productivo.